Es así de simple. TODOS SOMOS UNO. Todos provenimos de un mismo lugar y ese lugar ha recibido muchos nombres a lo largo de miles de años. Unos lo llaman Cielo, otros lo llaman Cosmos, otros Universo... Pero es el mismo lugar, que para mi es una fuente creadora. Es una energía que lo creó absolutamente todo y cada uno de nosotros, somos una pequeña parte de esa misma energía.
“Había una vez” un Ángel, que caminaba solo
por el vasto universo, triste, sin nadie a quien amar,
y por consiguiente, sin poder ser amado. Entonces, pensó en crear amor,
belleza e inteligencia que pudiera amar, proteger y que lo amara,
y creó la materia. Por sus esfuerzos y amor a tener qué proteger y enseñar,
los vivos de sus creaciones, sintieron que este ángel solitario
poseía el honor de nombrarse: Dios”.
por el vasto universo, triste, sin nadie a quien amar,
y por consiguiente, sin poder ser amado. Entonces, pensó en crear amor,
belleza e inteligencia que pudiera amar, proteger y que lo amara,
y creó la materia. Por sus esfuerzos y amor a tener qué proteger y enseñar,
los vivos de sus creaciones, sintieron que este ángel solitario
poseía el honor de nombrarse: Dios”.
Esa energía de la que hablo, está en nuestro interior, pero debido a la desconexión que elegimos realizar para poder experimentar la oscuridad y dualidad de nuestro ser, no recordamos quienes somos en realidad. Somos unos seres con un poder inmenso y solo debemos despertar nuestro lado espiritual, para poder utilizarlo. Nos ayudará tanto a nivel grupal, como a nivel individual a crear una realidad distinta, la que cada uno de nosotros queramos.
Gracias a todos por existir.
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